(1) El autor agradece los comentarios de Sánchez R., Durston J., Alvarado M., Peyser A., Foerster R. (2) En el compendio "Estudios Sociodemográficos de Pueblos Indígena" LC/DEM/G 146, Serie E. Nº 40. 1994 se encuentra una muy buena revisión de los estudios de carácter cuantitativo respecto de la población indígena. (3) Aunque como se analizará más adelante, ambos instrumentos no necesariamente son comparables. (4) En orden cronológico las cifras más conocidas son algunas de las siguientes: La CORFO, en 1952, sostiene que los mapuche son alrededor del 2,2% (139.547); Ormeño y Osses, en 1972, sostienen que los mapuche serían 800.000 de los cuales el 50% sería urbano y el otro 50% restante rural; la proyección del CIDA, en 1973 y 1974, fue de 323.000 y 400.000 respectivamente (4%); Hernández I. afirma en 1984 que en Chile "los mapuches son alrededor de 600.000 o sea aproximadamente el 6% de la población total". La proyección de Moltedo R. en 1986 fue del 3,5% (300.000 -> 400.000); el mismo año Montupil F. sostiene que la cantidad de mapuche en Chile es de un 6% (700.000); recientemente (1995) y después de la publicación de los resultados del Censo, Bengoa J. sostiene que los mapuche serían entre 600.000 y 800.000 a nivel nacional, cifras muy parecidas a su proyección anterior de alrededor de un 4% en 1987. En todo caso, la proyección relativamente más cercana a las cifras del censo fue la de Montupil. (Casi la totalidad de los datos de antes de 1986 han sido tomados de Moltedo, 1986) (6) Para un análisis detallado al respecto, léase Notas sobre la Población mapuche de la Región Metropolitana: Un Avance de investigación. Valdés, M. Pentukún N° 5. 1996. IEI-UFRO. (7) Existen dos dimensiones del fenómeno: discriminación exógena y endógena. El primer caso, dice relación con el tipo de discriminación tradicional, es decir, aquella actitud social estereotipada y explícita que tiene que ver con valoraciones diferenciales y asimétricas de biotipos, perfiles estéticos, sicológicos y colectivos, lo cual determina rechazo social, pobreza y marginación. Esta posible constatar esta dimensión en los estudios de las primeras generaciones de inmigrantes a la RM (en los cuales los estudios de Munizaga son paradigmáticos). Por otro lado, la discriminación endógena es una nueva generación del fenómeno o a lo menos una reconfiguración de ésta, en el sentido que su reproducción es distinta. Los antiguos mecanismos discriminatorios a través de los cuales esta actitud se expresaba en rechazo explícito, hoy día se han convertido en una expresión colectiva, en tanto los jóvenes mapuche admiten no sentirse rechazados ni excluidos por sus pares, los cuales no hacen distinción entre su condición de portadores de apellido mapuche y no mapuche. Sin embargo, cuando se adiciona al porte de apellido mapuche un proceso de recuperación identitaria, se activan los mecanismos de control social. Estos mecanismos se incrementan cuando el joven busca interacción con otros jóvenes mapuche. Es allí en donde se potencian los mecanismos de control social, es decir la discriminación se activa en lo colectivo y no en lo individual, como sucedía anteriormente. El joven internaliza dicho mecanismo de modo que rehuye la posibilidad y oportunidad de organización, puesto que ello activa los mecanismos discriminatorios. (8) Ver "02 Hipótesis para acercarse a la cuestión mapuche a través del censo y un addendum." Valdés M. 1998. http://www.mapunet.org/documentos/mapuches/hipcenso.htm (9) Aunque en estricto rigor, existen 3 estudios diferentes al respecto que tienen como base el censo 1992:
(11) Ahora bien, si se acepta que la migración mapuche respecto de la migración no mapuche, como se argumenta en el párrafo siguiente, es muy similar en sus niveles de importancia relativa, se podría descartar la validez de la afirmación (1) y por lo tanto también de la afirmación (2). (12) Léase "Migración mapuche y no mapuche". Valdés M. 1997. Revista Ethnos. http://rehue.csociales.uchile.cl/rehuehome/facultad/publicaciones/Ethno-/valdes1.htm (13) El carácter inductivo de la investigación migratoria mapuche será criticado en la nota siguiente. (14) Moltedo, afirma que "la desocupación es un fenómeno estructural del minifundio mapuche. La capacidad de expulsión del minifundio es por lo tanto muy alta". (Destacado nuestro) En esta aseveración hay una reafirmación de lo constatado en el estudio realizado por Bengoa y Valenzuela en comunidades mapuche de la provincia de Cautín (1982) en el sentido de que en la migración campo - ciudad mapuche se verifica una cifra promedio de 1,6 migrante permanente por familia. La misma lógica inductiva es posible apreciar en el Censo de reducciones indígenas seleccionadas. Cuestión que es expresada en los siguientes términos: "la información que se ha manejado ha permitido detectar que la migración sería el componente demográfico de mayor gravitación sobre la dinámica de la población. Esto acontecería a través de la fuerte emigración de orden selectivo". Censo de reducciones indígenas seleccionadas. Análisis Sociodemográfico. 1990. pg 57. A partir de estos resultados, se ha internalizado en los cientistas sociales preocupados por el tema mapuche, la percepción de que la migración mapuche históricamente ha sido alta. Dicha percepción ha sido absorbida y no ha sido criticada por los sectores intelectuales mapuche. Desde esa perspectiva Marimán P. llega a proponen un término alternativo al de migración mapuche: La diáspora mapuche (ver Acerca del desarrollo y la Diáspora mapuche, en Tierra, Territorio y Desarrollo Indígena. IEI-UFRO. 1995. Pg 190). Con ello Marimán quiere expresar que la migración mapuche ha tenido tal impacto, que en términos absolutos este proceso se ha llevado casi la totalidad de sus componentes a un lugar distinto de su origen vital. Por su parte M. C. Llanquileo, coincidentemente con lo afirmado por el Censo de reducciones indígenas seleccionadas, piensa que la migración es el componente demográfico de mayor importancia en la estructura de la población mapuche contemporánea. (Ver Etnicidad y género: Una mirada desde la Historia de vida de una Mujer mapuche. Tesis para optar al Título profesional de Asistente Social. 1996. Pg 17). Respecto de lo anterior, cabe hacer algunas reflexiones
(16) Manual de Formulación y Evaluación de Proyectos Sociales. Salamanca F. (inédito). Pag 9. (18) Este aspecto es uno de los más novedosos de la investigación realizada por el IEI-UFRO/CELADE. (19) Conocida es la crítica al inductivismo, por lo cual aquí no se reflexionará al respecto. (20) Aquí no se discutirán los aspectos técnicos de carácter epistemológico, puesto que hay disponible suficiente literatura especializada en el tema, alguna de la cual es citada en la bibliografía de este artículo. (21) El Estado Chileno reconoce en la "Ley Indígena" en su primer artículo lo siguiente: Artículo 1º.- El Estado reconoce que los indígenas de Chile son los descendientes de las agrupaciones humanas que existen en el territorio nacional desde tiempos precolombinos, que conservan manifestaciones étnicas y culturales propias siendo para ellos la tierra el fundamento principal de su existencia y cultura.(22) Situación de los Pueblos Indígenas en Chile: Análisis de la Encuesta de Caracterización Socioeconómica (CASEN 1996). MIDEPLAN. Enero 1998. Pg 4. (23) Ver Notas sobre la Población mapuche de la Región Metropolitana: Un avance de investigación Valdés M. Pentukún Nº 5. (24) Bengoa verificó la existencia de una concentración mapuche de más de 80% de personas mapuche en una cuadra (en la comuna de La Pintana) descubierta a través del censo. Lo mismo ocurrió con la implementación de un proyecto en Cerro Navia con Jóvenes mapuche. (25) Valenzuela Op. Cit Pg 61. (26) Valenzuela afirma que se aplicó un "muestreo aleatorio, o sea, que todos los hogares tienen la misma probabilidad de ser seleccionados". Op cit Pg 60. (27) Chile: Un instrumento para la evaluación del Impacto de los Programas Sociales. Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (CASEN). Schkolnik Mariana. En Focalización y Pobreza. Cuadernos de la CEPAL. 1995. Pg. 104. (28) Directrices para encuestas de base y evaluación de impacto. Documentos de formación para la educación en Población Familiar en el medio Laboral. YOON Paula. 1993. Documento N°1. OIT. Pg 34. |